
Por supuesto que sí, y lo serán más conforme avance el siglo, dando lugar a sujetos difusos o incluso a no-sujetos. En un mundo más allá del posmoderno en el que las fronteras se difuminan: entre lo animal y lo humano, entre los organismos y las máquinas, entre lo físico y lo no físico. Nuevas máquinas revolucionarias.
Las tecnologías emergentes a las que hoy accedemos casi sin darnos cuenta hacen posible que los sujetos con una identidad fija del siglo XX devengan sujetos de identidad flexible y fragmentaria, sujetos múltiples con puntos de vista contradictorios. O ex-sujetos que abran la posibilidad de la liberación de los yoes a través de su difuminación y la creación de nuevas máquinas para la revolución más radical: la que transforma la propia naturaleza humana.
Por ahora les dejo un par de preguntas por si quieren responder en los comentarios: ¿Se sienten enfermos si se descompone su ordenador o su computadora? ¿Se sienten mutilados si su ratón/mouse se atasca o pierden su conexión a Internet?
Sabrán ya lo que son si responden afirmativamente a estas preguntas, ¿verdad? ;-)
Leído acá.